La Bitco(i)nfusión


Reflexiones de medianoche sobre los obstáculos en el camino de aceptar innovaciones. O, ¿por qué es tan difícil creer en bitcoin?
Por Rodrigo Benadon

Bitcoin es una innovación tecnológica revolucionaria. Es software que imparcialmente sincroniza, protege y distribuye información de una forma inimaginable hace solo una década.
Es la base de datos más segura y neutral del mundo. No tiene dueños y ninguno de los participantes puede controlarla. Funciona independientemente de gobiernos, monopolios o mafias. Bitcoin no puede ser detenido, prohibido, hackeado o comprado. Bitcoin es indestructible.
Es un sistema transparente, abierto por igual a todos los participantes, sin importar de su geografía social y económica. Cualquiera puede agregar o recuperar información.
Estas características hacen que esta base de datos sea el libro de contabilidad financiera más fiable del planeta, la red de pagos en efectivo y sistema monetario global más avanzados que jamas hayamos visto.
Bitcoin es el servicio público más grande del mundo.
Las consecuencias de esta tecnología son excepcionales. Tiene el potencial de impactar nuestras vidas como nada anteriormente en la historia del mundo: la forma en que gobernamos, hacemos transacciones, nos comunicamos e identificamos.
Pero los cambios no son fáciles. Hay fricción. Hay dudas. Hay escepticismo.
¿De dónde viene el escepticismo?
El diccionario define el escepticismo como una actitud o disposición de duda e incredulidad. En mi opinión, y en términos generales, el escepticismo se reduce a un deseo de creer en el cambio y la innovación que está abrumado por el miedo. Tenemos incertidumbre porque tenemos miedo.
El “miedo” es fácil. La “confianza” es difícil.
El miedo es una emoción que surge de la creencia de que algo es una amenaza. Aunque nadie quiere sentir miedo, es fácil tener miedo. Los argumentos a favor del miedo se hacen en nombre de la prudencia, la astucia, el sentido común y el buen juicio.
Las justificaciones del miedo se entienden fácilmente y se aceptan sin problemas. ¿Y si lo que parece cierto en realidad no lo es? ¿Y si estoy siendo engañado? O lo peor de todo, ¿y si quedo como un estúpido, me lastimo o pierdo dinero porque le aposté al caballo equivocado?
Por el contrario, los argumentos a favor de la confianza requieren un esfuerzo extraordinario. Necesitamos ser convencidos para cambiar. Necesitamos evidencia. Debemos ser obligados y motivados a desafiar nuestras creencias sobre los peligros de confiar en una idea equivocada o confiar en una idea correcta pero con posibles resultados no deseados.
Le tenemos miedo al cambio… y tenemos miedo a confiar.
Bitcoin da miedo porque puede cambiarlo *todo*
Es difícil convencer a los escépticos de bitcoin que están a la defensiva, preocupados y confundidos. Su ansiedad, desesperación y confusión son comprensibles y quizás incluso razonables.
Los escépticos están atormentados porque bitcoin es un tema amplio, con muchas capas y se encuentra en constante evolución. Puede tener un profundo impacto en la política monetaria global, la gobernanza, los registros de propiedad y el comercio: los pilares de lo que consideramos fundamental para la vida cotidiana. No es sorprendente entonces que bitcoin despierte confusiones, susceptibilidades y escepticismo.
Este tema esta siendo abordado desde diferentes ángulos, con argumentos a favor y en contra por expertos en muchos campos: fanáticos del oro, economistas, criptógrafos, abogados, empresarios, políticos, anarquistas, reguladores, piratas informáticos, inversores, banqueros, historiadores y cualquier sabelotodo.
Hay demasiadas variables, disrumpiendo particularmente el corazón de lo que parece ser lo más importante: el dinero. ¿Deberíamos escuchar a los críticos prudentes o a los innovadores rebeldes?
¿Qué causa la bitco(i)fusión?
He tratado de identificar argumentos, obstáculos, trampas conceptuales y factores del miedo detrás de la confusión sobre bitcoin.
Aquí 11 bitco(i)nfusiones…
- bitco(i)nfusión 1, > Ignorancia técnica
En general, no nos importa cómo funcionan las cosas. Solo queremos disfrutar de los beneficios de la tecnología. En consecuencia, sin una comprensión fundamental de una innovación técnica, un crítico ignorante es propenso a sacar conclusiones erróneas.
Bitcoin es una tecnología; debe entenderse primero en términos técnicos. O al menos, los críticos deberían consultar a personas técnicas que lo entiendan.
En 1825, algunos creían que el cuerpo humano podría sufrir daños fatales al moverse a más de 50 kilómetros por hora. Muchos insistían que los trenes eran peligrosos y la gente simplemente moriría a esa velocidad. Algunos incluso pensaron que el cuerpo se derretiría, las extremidades serían arrancadas del cuerpo y el útero de una mujer se caería al alcanzar esa velocidad.
Tendemos a desconfiar de lo que no entendemos, hasta que aceptamos una tecnología ciegamente “porque simplemente funciona” y disfrutamos de sus beneficios sin hacernos más preguntas.
En cuanto a bitcoin, es esencial comprender sus conceptos primordiales. Entender lo que hace bitcoin, y por qué hace lo que hace, es insustituible. Incluso si no entendemos cómo lo hace (abstracción procesal).
Es importante tener en cuenta que bitcoin no es una invención estática. Es una tecnología colaborativa que sigue evolucionando, implementada a través del consenso y administrada por una comunidad global de contribuidores. Bitcoin continuará mejorando, presentando nuevas aplicaciones y oportunidades.
- bitco(i)nfusión 2, > Sacar conclusiones prematuras y/o pereza para escuchar todo el cuento
Otra barrera notable, es creer que uno entiende que es bitcoin luego de una charle de unos pocos minutos.
La promesa de bitcoin es tan imponente que es recomendable ser paciente frente a las explicaciones y tomar el camino más turístico.
Nuestra capacidad de prestar atención es limitada. Tendemos a sacar conclusiones apresuradamente, atando cabos rápidamente, decidiendo en modo binario: bueno/malo, confianza/desconfianza. Y a menudo se nos escapa el punto más central de la cuestión. Quizás esta actitud proviene de nuestro mecanismo ancestral de defensa, luchar o huir, cuando no teníamos tiempo para considerar si los leones eran gatos grandes amigables o bestias hambrientas.
Aquí un ejemplo de una conclusión irrelevante sacada en nombre de la prudencia: a principios del 1900, la gente tenía miedo de electrificar los hogares por miedo al efecto en los niños. Algunos expertos argumentaron que la electrificación era peligrosa porque los delincuentes podrían ver a mujeres y niños solos en casa y, por lo tanto, ser el blanco de abusos.
Los críticos también parecen ser naturalmente perezosos. Los conceptos nuevos y tan abarcativos como bitcoin son difíciles de procesar, sobretodo si uno no se enfoca plenamente. Los críticos, sin embargo, se desconectan luego de un par de minutos. Sobrevuelan la información, scrolling a la velocidad de la luz como en Instagram, en busca de objeciones, prestando la menor atención posible creyendo que si algo es lo suficientemente importante quedará.
Vivimos en un mundo con fatiga de atención.
No ayuda que los bitcoiners usemos términos abreviados: “¡Es un libro contable distribuido!” “¡Es dinero 2.0!” “Es oro digital.” “¡Es un protocolo como TCP / IP!” “¡A la luna en mi honeybadger lambo!” (Suspiros…)
Un curso acelerado sobre bitcoin lleva no menos de 1 hora. Los resúmenes son crípticos y provocan muchas tarjetas rojas. La gente se asusta y prefiere sacar conclusiones del lado de la prudencia.
En resumen, es importante mantener la mente abierta, ser paciente y escuchar todo el cuento antes de formar una opinión firme sobre el asunto.
- bitco(i)nfusión 3, > Definiciones estrechas
Otra trampa es pensar que bitcoin es solo una cosa cuando de hecho tiene muchos significados y facetas.
Algunos lo consideran un mecanismo de pago o un sistema transaccional como PayPal, SWIFT o Visa.
Otros lo entienden como dinero programable, una forma de facilitar, verificar o hacer cumplir automáticamente obligaciones y contratos.
Otra vision es que bitcoin es el software de contabilidad social más seguro del mundo, una forma de registrar globalmente deudas e intercambios.
Algunos valoran su la capacidad para garantizar la autenticidad e inmutabilidad de datos compartidos y poder auditar información de manera incontrovertible eficientemente.
Otro enfoque es considerarlo como una máquina de fecha cierta, global, sincronizada, un mecanismo de consenso que construye confianza.
También se puede pensar como una red abierta para compartir digitalmente información privada o confidencial (reputación, identidad, derecho, etc.) mientras se mantiene la propiedad y el control total de esos datos.
Aquellos que son más astutos definen bitcoin como una herramienta que brinda igualdad de oportunidades para acceder a derechos humanos básicos: registro y prueba de propiedad e identidad, libertad de expresión y libre acceso a la economía global.
Algunos incluso consideran que bitcoin es *el* camino para romper el monopolio del dólar como la moneda de reserva mundial (paradójicamente, la deuda nacional de los EE.UU. es de $22 trillones) y una alternativa a las tasas de interés negativas en un mundo financieramente estresado.
Naturalmente, bitcoin es *todas* estas cosas, y a medida que madure seguramente descubriremos nuevos usos y ampliaremos su definición.
- bitco(i)nfusión 4, > Ignorancia sobre el dinero
Podemos aceptar fácilmente que bitcoin sea software y también una red computacional, pero nos ponemos extremadamente a la defensiva cuando se lo llama dinero (o peor aún, un sistema monetario). Es contraproducente hablar de bitcoin como dinero sin comprender qué es realmente el dinero.
La mayoría no entiende las mecánicas del dinero fiat (fiduciario, soberano, por decreto): cómo funciona, de dónde viene, cómo se administra y cómo se crea o almacena el valor.
La historia y la teoría del dinero, desde las economías del regalo, la tokenización de deuda, hasta la comoditización del dinero, son complejas, fascinantes y están plagadas de luchas de poder, ineficiencias y desigualdades.
El valor de bitcoin se hace evidente cuanto más nos damos cuenta de la fragilidad de los sistemas tradicionales monetarios, financieros y de reserva fraccional bancario.
Bitcoin brilla como la evolución del dinero y la banca.
- bitco(i)nfusión 5, > Foco en la volatilidad y el precio
A través de los años, he tenido muchas conversaciones sobre bitcoin. Aunque la mayoría de las personas al principio expresan desconfianza sobre el concepto en general, están muy interesadas en el precio.
Se distraen del verdadero potencial de bitcoin percibiéndolo como una oportunidad de inversión, ya sea amando la volatilidad (mentalidad de trader) u odiando la volatilidad (mentalidad de inversor).
Hay un tercer grupo de pragmáticos autoproclamados que odian la volatilidad porque creen que lo hace inutilizable como reserva de valor o mecanismo de pago. El contraargumento es que estamos en una fase de descubrimiento de precio y que existen herramientas que neutralizan la volatilidad para pagos denominados en moneda fiat.
Aunque muchos creen que Bitcoin podría agregar varios ceros a su valor (midiéndolo en fiat), no es el aspecto más interesante de esta innovación tecnológica comparado con el impacto que puede tener sobre cómo vivimos nuestras vidas.
- bitco(i)nfusión 6, > El gurú ignorante
Cuando se trata de un tema nuevo, la mayoría de las personas confiamos en especialistas para que nos ayuden a formar una opinión. Sin embargo, en esta primera etapa de la revolución bitcoin, las ‘voces de la razón’ no siempre están bien informadas.
Ha habido muchas noticias y segmentos en televisión hablando de bitcoin. Sin embargo, es evidente que los comentaristas están lidiando con un tema con el que no están del todo familiarizados. Discusiones agitadas en television (o en hilos de Twitter) repletas de conceptos distorsionados, inexactos y prejuiciosos por panelistas y gurús ignorantes.
Incluso luminarias como Warren Buffet, Jamie Dimon, Paul Krugman, Peter Schiff y Nouriel Ruobini, a pesar de su pedigree, su elocuencia y confianza están equivocados en sus construcciones y conclusiones.
Es difícil para los dinosaurios entender que hay un cataclismo en el horizonte. Están arraigados en su visión matizada del mundo cotidiano.
Haz tu propio trabajo de investigación. Identifica tus propios expertos y asesores con mucho cuidado. No todos los gurús financieros entienden bitcoin. Ten cuidado con esquemas para hacerse rico rápidamente y con cualquiera que venda un producto que haya adquirido o creado de la nada.
Cuando los gurús ignorantes se conviertan en críticos, invitémoslos a la conversación.
- bitco(i)nfusión 7, > Sesgos del mundo desarrollado (no es un problema del primer mundo)
Los que viven en el mundo desarrollado (países donde la mayoría tiene fácil acceso a servicios financieros) no consideran que usar una tarjeta de crédito o ir a un cajero automático sea un gran inconveniente. Los bancos se están transformando para ofrecer acceso más fácil a sus servicios desde un teléfono. Las transferencias de dinero son rápidas y fáciles: PayPal y Venmo funcionan bien. Apple tiene una tarjeta de crédito integrada con el iPhone. Google anunció que ofrecerá cuentas corrientes.
Los ciudadanos del primer mundo pueden tender a descartar rápidamente a bitcoin como un pequeño cambio en su realidad financiera cotidiana. Una curiosidad tecnológica marginal.
Sin embargo, para los 4 mil millones de personas que están excluidas de la economía mundial, bitcoin no es trivial. Para las personas no bancarizadas, sub-bancarizadas, analfabetas, ubicadas en zonas rurales o en países con controles de capitales, poder enviar y recibir pagos (a cualquier lugar, en cualquier momento, a cualquier persona, casi gratis), atesorar, dar y recibir préstamos, y verificar independientemente la actividad económica global desde un teléfono sin intermediario de ningún tipo no es despreciable. De hecho, es liberador.
Tratando de no ser pesimista, me pregunto, ¿cómo enfrentará la próxima crisis financiera el mundo desarrollado? La historia nos muestra que de vez en cuando experimentamos reinicios económicos catastróficos, pánicos y colapsos totales…
Si la próxima crisis es tan drástica y violenta como muchos creen, seguramente traerá los problemas económicos del tercer mundo al primer mundo más rápido que decir “Bitcoin: un sistema de efectivo electrónico persona a persona”.
Bitcoin es la rampa de subida más rápida para sumarse a la economía global y la rampa de salida más rápida para escapar de nuestras frágiles estructuras económicas heredadas del pasado.
- bitco(i)nfusión 8, > La distracción del blockchain empresarial
La falacia de ‘blockchain, no bitcoin’ es una distracción que también suma a la confusión.
Blockchain es solo una de las tecnologías utilizadas por bitcoin. Aunque las blockchains son fantásticas, es bitcoin quien presenta la máxima expresión del concepto elaborado por Satoshi Nakamoto. El potencial completo de esta innovación es bitcoin.
Por supuesto, hay varios proyectos genuinamente maravillosos que usan blockchain e interconectan blockchains, o se construyen sobre la blockchain de bitcoin, pero el argumento de que blockchain es importante y que bitcoin no lo es, simplemente está injustificado.
Resumen rápido: blockchain es una base de datos (un registro digital) donde ninguna de las partes tiene control sobre la información almacenada. Solamente se puede agregar información a la base. No se puede editar ni borrar. La data es a prueba de censura. Todos los participantes mantienen copias idénticas de la información, sincronizada en tiempo real, y la mayoría tiene que ponerse de acuerdo (esto se hace de forma automática) sobre lo que se almacena. Es un sistema que funciona por consenso. Esta lista de registros permanentes es totalmente verificable y segura.
Para que los datos sean confiables, ninguna fuerza debe poder ejercer el control sobre la red. La custodia colaborativa de la información (en una blockchain, SQL o Google sheets) carece de sentido cuando los participantes pueden conspirar para editar los datos.
Los empresarios encuentran un ahorro en sus procesos usando una blockchain, para dar fecha cierta y sincronizar copias de sus datos. Sin embargo, una blockchain privada, generalmente requiere de permisos especiales y el acceso esta restringido. Está en cierta medida centralizada y es parcial a las necesidades de la organización o federación a la que sirve.
Las blockchains públicas, neutrales, no permisionadas y totalmente distribuidas, como la de bitcoin, son caras y requieren una masa crítica para garantizar la descentralización y gran cantidad de potencia informática (y electricidad) para desalentar a los malos actores y abusos.
Aunque se puede decir mucho más sobre este tema, permítanme esta reflexión: hasta un cierto grado, una blockchain in-house de una empresa pueden ayudar a una organización a proteger sus datos, rastrear activos y auditar procesos. Pero la desventaja es que las organizaciones ejercen control sobre la red y carecen de otras características que hacen que bitcoin sea tan único: emisión limitada, predeterminada e inalterable (no pre-minada), participación proof-of-work e incentivos equilibrados que alinean todas las fuerzas del mercado.
La blockchain de bitcoin es la base de datos más robusta del mundo y posee las características más avanzadas para alcanzar los objetivos más altos de la sociedad. Las blockchains privadas pueden ayudar a las organizaciones privadas a optimizar sus operaciones.
- bitco(i)nfusión 9, > Bitcoin no tiene respaldo
Un argumento que surge a menudo es que nada respalda a bitcoin.
Los contraargumentos proponen que bitcoin está respaldado por el costo de la electricidad requerida para su emisión y seguridad. O bien, que está respaldado por las matemáticas, un protocolo que lo hace el primer activo verdaderamente escaso con propiedades perfectas para usarlo como dinero.
Lógicamente, solo las cosas que inherentemente no son confiables deben ser respaldadas. Las cosas que no valen nada o son símbolos de otros activos derivan su valor de bienes subyacentes.
Lo que los escépticos realmente deberían preguntarse es: “¿De dónde surge el valor? ¿Cómo puede algo intangible o abstracto tener valor?”
Para la mayoría de las personas, resulta sorprendente que el dólar sea intangible. Naturalmente, los dólares en papel son muy pocos en comparación con los dólares digitales en las computadoras de los bancos.
El dólar no está realmente respaldado por nada.
Entonces, si no esta respaldado, ¿de dónde viene su valor? En última instancia, las cosas obtienen su valor de una sola cosa: la credibilidad que la sociedad les atribuye. Para que el dinero funcione, sus ‘propiedades monetarias’ deben ser creíbles.
Y esa credibilidad debe ganarse. Debe ganarse en competencia, en un mercado abierto, superando otras alternativas. El nombre del juego de esas ‘propiedades monetarias’ son la oferta y la demanda.
En el caso del dinero fiat, los bancos centrales por un lado emiten (la oferta), y por otro intentan incrementar las deudas (crédito) generando el incentivo fundamental para su demanda. Es decir, los bancos centrales incentivan el crédito creando así la demanda futura de la moneda en la que se pagará esa deuda.
Mientras el dinero fiat sea escaso en relación a las deudas pendientes, mantendrá su valor. En otras palabras, el dinero fiduciario tiene una escasez relativa y se vuelve cada vez menos escaso de manera absoluta.
Cuando los bancos centrales imprimen más dinero para financiarse (inflación), también necesitan crear más deuda para preservar su valor.
Nada más respalda el dólar (excepto quizás amenazas y obligaciones fiscales, que también son deudas).
El valor del dólar se basa en la confianza. Nuestra credibilidad de que la Reserva Federal de Estados Unidos gestionará correctamente la relación deuda/emisión.
La escasez de bitcoin es absoluta. No hay deuda. No requiere confianza o credibilidad.
- bitco(i)nfusión 10, > La locura de las ICOs
“Hay muchísimas criptomonedas, ¿verdad?”
No. Es un error agrupar a bitcoin junto con los cientos de tokens y startups vinculados a la criptografía y que usan una blockchain.
En términos generales, los tokens pueden ser representaciones digitales de los derechos de propiedad de una empresa o activo subyacente, conocidos como ‘security tokens’ y que según la ley están regulados como contratos de inversión. O también, se utilizan para capitalizar el desarrollo de un producto/servicio y luego usados para incentivar comportamientos, como la compra de algo ofrecido por el emisor del token. Estos se conocen como ‘utility tokens’.
Muchos tokens se ofrecieron a la venta a través de ICOs (Initial Coin Offerings) estilo crowdfunding para vender cuotapartes de activos o para capitalizar empresas. Pero muchos solo fueron usados por traders para especular…
El uso de la criptografía o de una blockchain no significa que un token sea una criptomoneda. Para que un token sea dinero, se deben cumplir ciertas condiciones. El dinero no es una alucinación colectiva o un evento fortuito. Se produce por diseño, con ciertos atributos que lo hacen funcionar (hasta que dejan de funcionar).
Un criptodólar digital no alude al mismo conjunto de soluciones que ofrece bitcoin. Un dólar digital en una blockchain o en las computadoras del Banco de la Reserva Federal tiene las mismas vulnerabilidades sistémicas que los dólares de papel (o los que se muestran en pantalla en la aplicación del banco).
Incluso Facebook ha tenido problemas con Libra, su propio activo criptográfico. Muchas compañías poderosas han dicho que se unirían al consorcio de validadores de transacciones, una federación de compañías en las que podríamos confiar. Con toda la pericia tecnológica e ingenio de personas capacitadas detrás del proyecto, Libra carece de los atributos fundamentales de bitcoin. Los gobiernos ya han articulado su oposición. Lo más probable es que el entorno regulatorio lo reduzca a un clearing de puntos de fidelización con un mercado secundario…
En cambio, bitcoin existe en el mundo del NO. No hay empleados. No hay empresa. No hay negocio. No hay patentes. No hay marketing. No hay abogados. No hay socios fundadores. No puede ser regulado, incautado o citado a declarar.
Es fácil crear una nueva criptomoneda. El software bitcoin es de código abierto. Esto significa que cualquiera puede copiarlo, alterarlo y usarlo sin restricciones.
Sin embargo, lograr que todos los ingredientes estén equilibrados y alcanzar una masa crítica es muy difícil. Algunas criptomonedas ya han fallado, otras están perdiendo credibilidad y apoyo. Y de todas formas, las mejores ideas serán consideradas para ser incorporadas al software de bitcoin.
Una gran cantidad de utility y security tokens ya no tienen ningún valor. Los proyectos fueron abandonados, se quedaron sin fondos, fueron identificados como estafas, estuvieron administrados negligentemente, o fueron víctimas de un mal timing o falta de market fit.
Bitcoin, la criptomoneda #1, es inmune y continua avanzando sin problemas.
- bitco(i)nfusión 11, > La narrativa revolucionaria
La gente solo quiere lo mejor para ellos mismos y sus familias. Nos preocupamos principalmente de cómo nos vamos a alimentar y cómo nos vamos a ganar la vida. Las revoluciones no son algo que la mayoría de la gente busca o quiere transitar.
Las revoluciones son un embole. Un fastidio. Son molestas.
¿Confiar en un nuevo sistema monetario electrónico sin nadie a cargo? ¿Creado por un personaje anónimo? No, gracias. Los libertarios, los anarcocapitalistas, los nerds y los millennials, los cripto memes y los moon boys, los trolls de Twitter, los estafadores y los creadores de nuevos tokens, lo hacen ciertamente colorido… pero también dan miedo.
Hay gente que ha ido a la carcel. Hackers usan bitcoin para extorsionar, y a los narcotraficantes y a los terroristas también les interesa.
Podemos involucrarnos tímidamente. ¿Pero quién tiene tiempo? Dejemos que los poderosos debatan y se peleen y que nos avisen cuando lleguen a una conclusión. Es mejor quedarse en el molde…con la gente normal.
Quizás.
Pero la revolución de bitcoin es diferente. No será televisada. Tiene el potencial de desencadenar la redistribución de riqueza más grande que hayamos visto. Poder abandonar el dinero emitido y controlado por un estado, compartir información resistente a la censura, tener una plataforma global de transmisión de valor, neutral y universal, nos abre las puertas a un nuevo paradigma. Tiene el potencial de cambiarlo todo. Todo.
Si ocurre (cuando ocurra), el éxodo del dinero fiat será drástico. Como una manada de elefantes intentando escapar por una cerradura.
Los escépticos y los críticos podrán ser los últimos en salir. Y en retrospectiva, el poder de la revolución de bitcoin habrá sido evidente. Pero para entonces, el tren habrá dejado la estación.
Esta revolución abre un camino hacia una nueva economía, una nueva visión del mundo. Un nuevo tipo de dinero que compite en el mercado como cualquier producto, por sus propios méritos, a pesar de fuerzas opositoras. La solución que funcione mejor y proporcione el mayor valor para la sociedad prevalecerá.
En todo sentido, bitcoin es simplemente mejor que todos nuestros sistemas heredados. Es una ratonera mejorada.
En palabras del gran Ralph Waldo Emerson, “Construye una mejor ratonera y el mundo abrirá un camino hacia tu puerta”.
Creo que la hemos construido. Y el mundo esta tocando el timbre.
RB
@rbenadon